La mayoría de los suelos cuentan con cantidades considerables de Silicio, pero la disolución a través de los minerales existentes es muy lenta y se ve aún más afectada cuando se intensifica la agricultura y no hay reposición de nutrientes; esto ocasiona un descenso en los niveles de Si disponibles en el suelo.

El Silicio soluble se acumula en las células debajo de la cutícula de la hoja y actúa como una barrera en contra de la penetración de hongos y además estimula la producción de compuestos que forman parte de las defensas naturales de la planta contra las infecciones fungosas y la agresión de insectos.

Debido a que el Silicio no es un elemento esencial como el Zinc, por muchos años se desconocieron sus propiedades como fertilizante y no se incluía como un bioestimulante agrícola, pero recientemente, ha ganado importancia agronómica en todos los procesos de nutrición vegetal, para mejorar las propiedades de los suelos y la sanidad de las plantas.

La aplicación del Silicio vía foliar se comporta como un nutriente translaminar profundo o de sistemia imperfecta, estimula la absorción del elemento vía radicular y de otros sinérgicos complementarios como el calcio y el boro, los cuales, aplicados en conjunto con organismos benéficos como Trichoderma o Beauveria cooperan para su establecimiento.

Beneficios de la aplicación de Si en los cultivos

• Permite reemplazar hasta en un 40% el uso de fungicidas protectantes.

• Permite reemplazar hasta en un 40% el uso de fungicidas protectantes.

• Mejora el poder germinativo de las semillas en un 10%.

• Disminuye la mortalidad por heladas y la incidencia de plagas y enfermedades.

• Mejora la eficacia del uso del agua.

• Disminuye el ataque de enfermedades por hongos y plagas.

• Aumenta la productividad.

• Aumenta la resistencia al volcamiento.

• Produce  plantas más erectas, con una mejor habilidad fotosintética.

• Disminuye el efecto de las heladas.

• Regula la transpiración (economía del agua).

• Incremento en formación de fitoalexinas.

Las posibilidades de mejora en los procesos agrícolas mediante el uso del Silicio son inmensas, además de contribuir a la resistencia vegetal contra los ataques de hongos y parásitos patógenos, brinda mayor tolerancia a las tensiones medio ambientales como frío excesivo, calor, sequía, salinidad, toxicidad mineral o deficiencias y confiere a las plantas mayor capacidad para aprovechar eficientemente el agua del suelo. Todo lo anterior genera impactos positivos en la productividad, la competitividad y la calidad de las cosechas de los diferentes cultivos tratados.